martes, 21 de agosto de 2012

Los generales


Los generales

CREDITO: 
Alberto Aguirre M./El Economista
Las filtraciones sobre los posibles sustitutos del General Secretario de la Defensa Nacional arreciaron, al tiempo que avanzaban las campañas presidenciales. Las primeras versiones, en esa dirección, provenían de Washington DC, donde había dudas sobre quién ganaría, no obstante que Enrique Peña Nieto y Josefina Vázquez Mota habían expresado públicamente que darían continuidad a la estrategia de combate al crimen organizado implementada por la administración calderonista.
Un mes antes de las elecciones presidenciales, de acuerdo con versiones de prensa no refutadas, México envió al Pentágono una lista de prospectos a encabezar la Sedena, con el fin de “disipar dudas y ofrecer garantías de continuidad” en el combate al crimen organizado. En estricto orden alfabético aparecían en ese listado: Salvador Cienfuegos Zepeda, Augusto Moisés García Ochoa, Carlos Demetrio Gaytán Ochoa y Arturo Oliver Cen.
García Ochoa, actual director de administración de la Sedena, tenía el visto bueno de los candidatos presidenciales de las tres principales fuerzas políticas, en tanto que Gaytán Ochoa, subsecretario de la Defensa Nacional en este sexenio, tendría una mejor perspectiva, de haber triunfado el PAN. Cienfuegos, en cambio, resultaría la mejor carta para los priístas. Oliver Cen, quien fungió como agregado militar en la Embajada de México ante el gobierno de Barack Obama, sería el preferido del Pentágono.
Augusto Moisés García Ochoa, actual director general de administración de la Sedena, parece haber sido víctima del fuego amigo -en sentido figurado, claro está- luego de que se diera a conocer la erogación de más de 5,000 millones de pesos en la compra de un equipo de inteligencia de última generación.
El futurismo en la Sedena llegó a niveles nunca antes vistos pasada la elección presidencial. Al grado de que el secretario, Guillermo Galván tuvo que llamar la atención a los involucrados, de acuerdo con versiones no desmentidas.
Tal gesto era más que necesario dado el activismo de quienes buscan quedarse al frente de la Secretaría de la Defensa.
Allí está, por ejemplo, el ímpetu del general Virgilio Daniel Méndez Bazán, comandante de la IX Región, con sede en Mérida, Yucatán, quien, de acuerdo con una tarjeta informativa que ha circulado profusamente en las semanas recientes, ha llegado a manifestar en diversas reuniones que, dada su añeja relación con Peña Nieto, bien podría ocupar el máximo cargo para un militar de su rango. También se le ha escuchado decir -de acuerdo con reportes escritos a los que se tuvo acceso recientemente- que quedaría conforme si “su hermanito” lo invitara a hacerse cargo de la Secretaría de Seguridad Pública del gobierno federal.
Tales reportes establecen que Méndez Bazán estableció su hermandad cuando estuvo al frente de la XXII Zona Militar, con sede en Santa María Rayón, etapa que coincidió con el sexenio de Peña Nieto como Gobernador del Estado de México. Al margen de sus expresiones indiscretas, este divisionario efectivamente cuenta con el respaldo de gobernadores y líderes priístas de la zona sureste del país.
Méndez Bazán ingresó al Ejército Mexicano el 15 febrero de 1965. A su generación también pertenecen los generales Oliver Cen, ahora jefe del Estado Mayor de la Secretaría, y Gaytán Ochoa, quien funge como subsecretario.
Cienfuegos Zepeda es oficial mayor de la Secretaría; tiene 64 años cumplidos y está a punto de cumplir 50 años en el servicio militar. Forma parte de una clase de alumnos que ingresó en 1964 al Colegio Militar y de la que también egresaron José Armando Tamayo Casillas, jefe del Estado Mayor Presidencial en el sexenio del presidente Vicente Fox, y Raúl López Castañeda, comandante de la V Región Militar, destacamentazo en Manzanillo, Colima.
Entre los probables sucesores de Galván Galván mencionados en esa tarjeta informativa está el general Roberto Miranda Sánchez, no obstante que ya tiene más de un año en situación de retiro. Exjefe del Estado Mayor Presidencial, mientras Ernesto Zedillo estuvo en Los Pinos, también presume de ser cercano a Peña Nieto, amigo de Carlos Slim y seguro titular de la dependencia, si Andrés Manuel López Obrador hubiera ganado la elección.
Su estatus de retirado supone un escollo grande, pues desde la Revolución Mexicana todos los secretarios de la Defensa han sido generales de división en activo. En contra, además, tiene 11 expedientes abiertos dentro de la Sedena por abuso de autoridad y lesiones a compañeros de armas.
El documento también incluye a Roberto de la Vega Díaz, comandante de la III Región Militar, con sede en Mazatlán,­ Sinaloa. Entre sus aspectos favorables destaca su oriundez (es originario de Toluca), pero también destacan los problemas que tuvo en el Heroico Colegio Militar.
Al margen de la autenticidad de esas versiones, llama la atención que las filtraciones y los golpes bajos siguen, imparables.

No hay comentarios: